Según el Informe sobre Drogas 2018 en España, la proporción de urgencias relacionadas con el consumo de marihuana sigue mostrando una clara tendencia al alza. Se observa un incremento progresivo en la demanda de admisión a tratamiento. A continuación te contamos cuáles son los efectos de la marihuana.
Efectos de la marihuana
La gente comienza a fumar porque cree que es la droga de la paz y el relax, sin embargo, pronto empiezan a encontrarse más irritables. Lo último en lo que piensan es que la culpable de los problemas que tienen es de la marihuana. La realidad es que fumar marihuana trae muchos problemas. Consumir marihuana afecta a la salud mental. La mal llamada droga de la paz es la reina de la apatía, la desgana y la irritabilidad.
El consumo habitual de marihuana está relacionado con al aparición de síntomas depresivos, con la incomunicación familiar y con la dificultad para resolver los propios problemas.
Hay muchos mitos en torno a su consumo y quizás el que más daño haga es el de que es inofensiva para la salud. Argumentan que es un producto natural. Que sea natural no quita que sea dañino para la salud. Ser natural no es sinónimo de ser inocuo.
Al hecho evidente de que a alguien le ha sentado fatal, en el argot de la calle le llaman un mal viaje. Se banaliza por la falta de información y puede ser un cuadro confusional, de ansiedad, etc. que son graves. Y es que:
Fumar o tomar marihuana puede provocar adicción.
Es una droga con diferentes cannabinoides psicoactivos con potencial adictivo. Actúan sobre el sistema nervioso central y alteran el sistema de gratificación y recompensa del cerebro. En personas con predisposición genética a la adicción o con vulnerabilidad, que sume un número suficiente de factores de riesgo, puede provocar la adicción. Hará que la ansiedad que provoca domine tu día a día.
Las personas que fuman durante años es porque han desarrollado la tolerancia y dependencia. No les afecta igual porque su organismo está acostumbrado. No es una buena señal.
El consumo puede tener efectos psicológicos. Más en los jóvenes.
La edad de inicio ha bajado mucho con lo que, entre el aumento de su toxicidad por la alternación genética de las plantas y la vulnerabilidad de un cerebro en su etapa plástica, los centros de ingreso especializados reciben cada vez más pequeños a los jóvenes con problemas de trastorno por consumo de hierba.
Los jóvenes que empiezan a fumar muestran desinterés por otras actividades y problemas de rendimiento escolar o laboral. Estos problemas de rendimiento están justificados por los efectos a corto plazo. Además de alteraciones psicomotoras, el consumo de marihuana provoca dificultades para estudiar, disminuye las funciones de concentración y de atención, perjudica la memoria y la capacidad de abstracción.
Si hablamos de los efectos inmediatos de fumar marihuana, lo que sería el colocón de maria, este provoca euforia, bienestar, sensación de placidez, enlentecimiento del tiempo, alteración de las percepciones, y otros. Puede ir acompañada de alucinaciones e incluso de reacciones muy parecidas a las que da el consumo de LSD. Esto puede hacer que sorprenda con crisis de pánico a dosis altas y síntomas psicóticos.
Sobre todo afecta si hay una predisposición a padecer trastornos mentales. La mayoría de las personas no sabe qué tipo de propensión a determinadas enfermedades tiene. Desencadena brotes psicóticos aún sin tener antecedentes.
Enfermedades a largo plazo
Si esto provoca a corto plazo, no es de extrañar que el consumo a largo plazo pueda desarrollar trastornos mentales y graves enfermedades. Los estudios concluyentes fluctúan entre su responsabilidad o no en la depresión y son firmes a la hora de establecer su relación con la psicosis (esquizofrenia).
Interfiere y afecta a la vida del fumador
Ya por el síndrome amotivacional que aparece tanto en jóvenes como en adultos ya por los síntomas del síndrome de abstinencia. Al dejar de fumar, irritabilidad, agresividad, insomnio, disminución de apetito, ansiedad y otros. Como los tiempos que el organismo aguanta sin fumar cada vez son menores, los consumidores fuman para relajarse ante estos síntomas. Por tanto, una persona en esta situación va a ver afectada no sólo su salud mental sino también las relaciones con los demás y con su entorno.
No sólo provoca trastornos mentales, sino que también es un riesgo de padecer otras enfermedades.
- Al fumarla, el humo contiene productos cancerígenos. No es menos perjudicial que el tabaco. Además frecuentemente se fuma mezclada con tabaco. Esto incrementa el riesgo de sufrir cáncer de pulmón. También, el hecho de que se fume sin filtro, aspirando el humo con retención hasta el final puede generar un enfisema pulmonar o bronquitis crónica.
- Otras enfermedades. Puede precipitar cuadros de taquicardia por la alteración del sistema cardio- circulatorio además de afectar al sistema endocrino también.
A pesar de ser una droga cuyo consumo está muy banalizado, los efectos de la marihuana pueden ser muy negativos para la salud de la persona que la consume. En el caso de desarrollar una adicción a esta sustancia, un tratamiento de adicción a la marihuana resulta imprescindible para frenar los efectos negativos que esta sustancia provoca en el organismo. Toda adicción tiene salida si se recurre a la ayuda apropiada.